LA ORACIÓN 2da parte de 3



LA TEFILÁ
"LA COMUNICACIÓN CON EL ETERNO YAHWEH" A LA LUZ DE LAS ESCRITURAS

2 parte de 3

¿Por qué asuntos es apropiado hacer tefilot?¿Cuáles deben ser nuestras prioridades?¿Cómo y cuándo nos responde El Padre las Tefilot?


Estas son preguntas que comúnmente hacen creyentes y no creyentes a veces entrando en polémicas, pero dejemos que sean las Escrituras que nos guíen al respecto.

Las oraciones consisten básicamente en:
Confesión (2Cronicas 30:22), peticiones o solicitudes (Hebreos 5:7), expresiones de alabanza y acción de gracias (Salmos 34:1; 92:1) y votos (1Samuel 1:11; Eclesiastés 5:2-6).

La oración que El Mesías enseñó a sus discípulos era simplemente un modelo, pues ni Yeshua ni sus discípulos se adhirieron rígidamente a esas palabras específicas en sus oraciones posteriores (Mateo 6:9-13).

Desglosando la oración modelo que El Mesías enseño aprenderemos muchas cosas al respecto vinculadas a nuestras peticiones.

Las primeras palabras de esta oración se concentran en la cuestión de primera importancia:

LA SANTIFICACIÓN (es decir apartarlo, no profanarlo) DEL NOMBRE DE ELOHIM (YAHWEH) que empezó a ser vituperado en la rebelión de Edén y la realización de la voluntad divina por medio del Reino prometido, a la cabeza del cual está la descendencia prometida, el Mesías (Yeshua/Jesus). (Génesis 3:15;) la oración requiere que el que ora esté claramente del lado de Dios en esa cuestión.


La parábola del Mesías registrada en Lucas 19:11-27 muestra que la "venida del Reino" significa: que su venida es para ejecutar juicio, destruir a todos los opositores y aliviar y recompensar a todos aquellos que confían en El. (Compare con Apocalipsis 16:14-16; 19:11-21).

Por lo tanto, la siguiente expresión:
“HÁGASE TU VOLUNTAD, COMO EN EL CIELO, TAMBIÉN SOBRE LA TIERRA”, no se refiere principalmente a que los seres humanos hagan la voluntad del Todopoderoso, sino, más bien, a que Dios mismo actúe en cumplimiento de su voluntad para la Tierra y sus habitantes, y manifieste el poder que tiene para llevar a cabo su propósito declarado.

Obviamente, el que ora también expresa de ese modo su preferencia por esa voluntad y su deseo de someterse a ella! (Mateo 6:10; Mateo 26:39)
La solicitud de recibir el pan de cada día, perdón, librarnos de la tentación y liberación del malvado está relacionada con el deseo que tiene el que hace la súplica de continuar viviendo en el favor del Eterno. Expresa este deseo por todos los que comparten su fe, no solo por sí mismo (comparé con Colosenses 4:12)


Lo expresado en la oración modelo son de importancia fundamental para todos los hermanos y hermanas en la fe ya que expresan necesidades que todas las personas tienen en común.
Sin embargo, el contexto bíblico muestra que hay muchos otros asuntos que pueden afectar a las personas a mayor o menor grado o que pueden ser el resultado de circunstancias particulares de cada individuo; estos también son temas apropiados para incluir en sus oraciones.


Aunque no se mencionan específicamente en la oración modelo del Mesías, sin embargo, están relacionados con los que esta presenta.


Así pues, las oraciones personales prácticamente pueden abarcar una gran variedad de facetas de la vida (Juan 16:23, 24; Filipenses 4:6; 1Pedro 5:7.)
Aunque todos desean correctamente que su conocimiento, entendimiento y sabiduría aumenten (Salmo 119:33, 34; Santiago 1:5), es posible que algunos lo necesiten de manera especial más que otros.
Se puede pedir la guía de Yahweh en asuntos que tengan que ver con decisiones judiciales, como hizo Moisés (Éxodo 18:19, 26; comparé con Números 9:6-9; 27:1-11; Deuteronomio 17:8-13), o discernimiento para el nombramiento de personas a puestos de responsabilidad dentro de las congregaciones (Números 27:15-18; Lucas 6:12, 13; Hechos 1:24, 25; 6:5, 6) también podemos y debemos pedir fortaleza y sabiduría para llevar a cabo ciertas asignaciones o para encarar pruebas o peligros específicos (Génesis 32:9-12; Lucas 3:21; Mateo 26:36-44)


Los motivos para bendecir a Yahweh y Yahshua y darle gracias pueden variar según las propias experiencias de cada individuo (1Corintios 7:7; 12:6,7; 1Tesalonicenses 5:18.)
En 1 Timoteo 2:1,2 el apóstol habla de oraciones respecto a hombres de toda clase, respecto a reyes y a todos los que están en alto puesto (pero entendiendo todo el contexto bíblico) vemos que durante su última noche con sus discípulos, El Mesías dijo en oración que no hacía petición respecto al mundo, sino respecto a los que El Padre le había dado, y también dijo que ellos no eran parte del mundo, sino que este los odiaba (Juan 17:9,14.) Por lo tanto y en armonía con la suma de toda la Palabra, parece ser que las oraciones cristianas respecto a los gobernantes del mundo se limitan a determinados aspectos.
Las palabras que a continuación dijo el apóstol indican que tales oraciones son fundamentalmente a favor del pueblo de Yahweh, “a fin de que sigamos llevando una vida tranquila y quieta con plena devoción, piedad y seriedad”. (1Timoteo 2:2.) Hay ejemplos anteriores que ilustran este hecho, como la oración de Nehemías para que Elohím lo ‘hiciese objeto de piedad’ delante del rey Artajerjes y así edificar el Templo de Yahweh (Nehemías 1:11; compare con Génesis 43:14) también lo vemos en el mandato que Yahweh dio a los israelitas en cuanto a (buscar la paz de la ciudad Babilonia) en la que estarían exiliados, orando a favor de ella, pues "en la paz de ella resultaría haber paz para ellos mismos" (Jeremías 29:7) De igual manera, los discípulos oraron con respecto a las amenazas de los gobiernos y gobernantes de su día (Hechos 4:23-30), y sus oraciones a favor de Pedro cuando se hallaba encarcelado debieron incluir también a los oficiales que tenían autoridad para liberarlo (Hechos 12:5.) Asimismo, en armonía con el consejo del Mesías, oraron por sus perseguidores (Mateo 5:44; comparé con Hechos 26:28, 29; Romanos 10:1-3.)



Desde tiempos antiguos se le ha dado gracias a YHWH por sus provisiones, como el alimento (Deuteronomio 8:10-18; Mateo 14:19; Hechos 27:35; 1Corintios 10:30,31) Sin embargo, se debe agradecer ela bondad del Creador con relación a “TODO”, no solo a las bendiciones materiales. (1Tesalonicenses 5:17,18; Efesios 5:19, 20.)


Esto lo podemos ver en todo lo que el contexto Bíblico nos ilustra, respecto a lo que rige el contenido de las oraciones es el conocimiento de la voluntad de Yahweh, puesto que el que suplica debe darse cuenta de que si quiere que su solicitud le sea otorgada, esta tiene que agradar a Elohim.
Sabiendo que los inicuos y los que no hacen caso de la Palabra del Eterno no gozan de Su favor, es obvio que el que hace la súplica no puede solicitar lo que es contrario a la rectitud y a la voluntad revelada en las Escrituras del Padre, que incluye las enseñanzas del Hijo y de sus discípulos inspirados (Juan 15:7,16) Por lo tanto, lo que se dijo en cuanto a "pedir alguna cosa" (Juan 16:23) no debe ni puede tomarse fuera del contexto.
La expresión “alguna cosa” evidentemente no abarca lo que se sabe o hay motivo para creer que no agrada a Yahweh y a su Hijo.
Juan escribe: “Y ÉSTA ES LA CONFIANZA QUE TENEMOS EN EL: SI PEDIMOS ALGO SEGÚN SU VOLUNTAD, EL NOS OYE”. (1Juan 5:14; Santiago 4:15.)


El Mesías les dijo a sus discípulos: “Una vez más les digo, que si en este mundo dos de ustedes se ponen de acuerdo en lo que piden, mi Padre, que está en los cielos, se lo concederá” (Mateo 18:19)
Si bien es propio incluir en la oración cosas materiales que necesitemos, como el alimento, no lo son los deseos y ambiciones materialistas, según se indica en (Mateo 6:19-34 y 1 Juan 2:15-17).
Tampoco es correcto orar por aquellos a los que YHWH condena (Jeremías 7:16; 11:14). Romanos 8:26,27 da a entender que en ciertas circunstancias el creyente no sabría exactamente qué pedir; no obstante, YHWH entiende sus (murmullos) no expresados.

EL APÓSTOL MUESTRA QUE ESTO SE DEBE AL RUAJ KOSESH

Hay que recordar que Elohim YHWH inspiró las Escrituras por medio de su Ruaj/Espíritu (2Timoteo 3:16,17; 2Pedro 1:21) En estas se incluyeron profecías y acontecimientos que prefiguraron las circunstancias que les sobrevendrían a sus siervos en tiempos posteriores, y mostraron cómo Yahweh los guiaría y les daría la ayuda que necesitaban. (Romanos 15:4; 1Pedro 1:6-12) Es posible que el creyente no se dé cuenta de que lo que pudiera haber pedido en oración (pero que no sabía cómo) ya estaba enunciado en la Palabra inspirada del Poderoso YHWH hasta después que haya recibido la ayuda necesaria (1Corintios 2:9, 10.)

RESPONDIENDO LAS ORACIONES


Aunque en el pasado El Todopoderoso mantuvo cierto grado de comunicación recíproca con algunas personas, eso no fue lo común, puesto que la mayor parte de las veces la limitó a representantes especiales, como Abraham y Moisés (Génesis 15:1-5; Éxodo 3:11-15; comparé con Éxodo 20:19)
Incluso en esos casos, las palabras del Eterno se transmitieron mediante ángeles, a excepción de cuando habló a su Hijo o acerca de él mientras este estuvo en la Tierra. (Comparé con Éxodo 3:2, 4; Gálatas 3:19.) Tampoco fueron frecuentes los mensajes entregados personalmente por ángeles materializados, como lo manifiesta el efecto perturbador que solían producir en aquellos que los recibían (Jueces 6:22; Lucas 1:11, 12, 26-30.) De modo que en la mayoría de los casos, la respuesta a las oraciones se daba por medio de los profetas o concediendo la solicitud o rehusando otorgarla.
Muchas veces la respuesta de Elohim a las oraciones se podía discernir claramente, como cuando libraba a Sus siervos de sus enemigos (2Cronicas 20:1-12, 21-24) o satisfacía sus necesidades físicas en tiempos de gran escasez (Éxodo 15:22-25.) Pero no hay duda de que las respuestas más frecuentes no eran tan obvias, puesto que estaban relacionadas con dar fuerza moral y entendimiento para que la persona pudiera apegarse a un proceder justo y desempeñar el trabajo que Yahweh le había asignado (2Timoteo 4:17)
En particular en el caso del cristiano, la respuesta a las oraciones tenía que ver con asuntos principalmente espirituales, los cuales, aunque no son tan espectaculares como algunos actos poderosos del Creador en tiempos antiguos, son igualmente vitales (Mateo 9:36-38; Colocenses 1:9; Hebreos 13:18; Santiago 5:13)
La oración aceptable debe dirigirse "El Eterno Yahweh", tratar sobre asuntos apropiados los que están en armonía con los propósitos declarados en su Santa Palabra, hacerse de la manera debida por medio del que El Padre a nombrado, El Mesias Jesús/Yeshua y con un buen motivo y un corazón limpio (Compáre con Santiago 4:3-6)

Además de todo lo antedicho, es necesario persistir.
El Hijo dijo que se "siguiera pidiendo, buscando y tocando", sin desistir (Lucas 11:5-10; 18:1-7).


ESTO HIZO SURGIR LA CUESTIÓN DE SI HALLARÍA SOBRE LA TIERRA FE/OBEDIENCIA DURANTE SU FUTURA "llegada" (Lucas 18:8).

Surgen muchas interrogantes sobre la APARENTE demora de Yahweh en contestar algunas oraciones esto NO SE DEBE A INCAPACIDAD NI A FALTA DE DESEO DE AYUDAR, COMO PRUEBAN LAS ESCRITURAS (Mateo 7:9-11; Santiago 1:5,17) En algunos casos la respuesta debe esperar el "el tiempo" del Creador (Lucas 18:7; 1Pedro 5:6; 2Pedro 3:9; Apocalipsis 6:9-11.)

TAMBIÉN SE NOS MUESTRAS QUE HAY FUERZAS ESPIRITUALES DETENIENDO LAS RESPUESTAS A LAS ORACIONES (Daniel 10:12-14 Entonces aquel hombre me dijo: «No tengas miedo, Daniel, porque tus palabras fueron oídas desde el primer día en que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios. Precisamente por causa de tus palabras he venido. EL PRÍNCIPE DEL REINO DE PERSIA SE ME ENFRENTÓ DURANTE VEINTIÚN DÍAS, pero Miguel, que es uno de los príncipes más importantes, vino en mi ayuda, y me quedé allí, con los reyes de Persia. Ahora he venido para hacerte saber lo que va a sucederle a tu pueblo en los últimos días. La visión es para esos días.»)

No obstante, parece ser que el motivo principal es que así YAHWEH deja que los que le piden demuestren la profundidad de su interés, la intensidad de su deseo y la autenticidad de su motivo. (Salmos 55:17; 88:1, 13; Romanos 1:9-11) A veces deben ser como Jacob, que luchó mucho tiempo a fin de obtener una bendición, es decir en nuestro caso espiritualmente y oración (Génesis 32:24-26).


De manera similar, aunque no se puede presionar a Elohim para que actúe por la mera cantidad de suplicas, Él advierte el grado de interés que muestran sus siervos en conjunto y actúa cuando colectivamente muestran profunda preocupación e interés unido (Compáre con Éxodo 2:23-25).
Cuando existe cierto grado de apatía, YHWH puede retener su ayuda.
En la reconstrucción del templo de Jerusalén, un proyecto que no recibió el apoyo necesario durante algún tiempo (Esdras 4:4-7, 23, 24; Ageo 1:2-12), hubo interrupciones y retrasos, mientras que más tarde Nehemías reconstruyó los muros de la ciudad con oración y buen apoyo en tan solo cincuenta y dos días. (Nehemias 2:17-20; 4:4-23; 6:15)
En la carta a la congregación de los corintios, Shaul habla de cómo YHWH lo libró de la muerte, y dice: “si ustedes nos apoyan con sus oraciones por nosotros. Si muchos oran por nosotros, también serán muchos los que den gracias a Dios por el don concedido a nosotros por tantas oraciones” (2Corintios 1:8-11; compáre con Filipenses 1:12-20) Se destaca con frecuencia el poder de la oración de intercesión, tanto individual como colectiva.


Con respecto a "orar unos por otros" Santiago dijo: “El ruego del hombre justo, cuando está en acción, tiene mucho poder”. (Santiago 5:14-20; compáre con Génesis 20:7,17; 2Tesalonicenses 3:1,2; Hebreos 13:18, 19.) También se destaca la súplica frecuente a El Gobernante Soberano, sobre un tema de naturaleza personal.
El que ora presenta razones de por qué cree que la petición es apropiada, de su motivo correcto y desinteresado, y de que hay otros factores que pesan más que sus propios intereses o consideraciones.
Estos podrían ser la honra del propio nombre del Elohim, el bien de su pueblo o también el efecto que pudiera tener en los observadores el que YHWH actuara o se retuviera de hacerlo.
Se puede apelar a la justicia del Todopoderoso y a su bondad amorosa, ya que Él es un Elohim de misericordia. (Compáre con Génesis 18:22-33; 19:18-20; Éx 32:11-14; 2Re 20:1-5; Esdra 8:21-23)


El Mesias también "ABOGA" por sus fieles seguidores (Romanos 8:33, 34)
Todo el libro de los Salmos consiste en oraciones y canciones de alabanza a Yahweh, cuyo contenido ilustra lo que debería ser la oración.
Entre muchas oraciones notables se cuentan las de:


Jacob (Génesis 32:9-12)
Moisés (Deuteronomio 9:25-29)
Job (Job 1:21)
Ana (1Samuel 2:1-10)
David (2Samuel 7:18-29; 1Cronicas 29:10-19)
Salomón (1Reyes 3:6-9; 8:22-61)
Asá (2Cronicas 14:11)
Jehosafat (2Cronicas 20:5-12)
Elías (1Reyes 18:36, 37)
Jonás (Jonás 2:1-9)
Ezequías (2Reyes 19:15-19), Jeremías (Jeremías 20:7-12; el libro de Lamentaciones)
Daniel (Daniel 9:3-21)
Esdras (Esdras 9:6-15)
Nehemías (Nehemias 1:4-11)
ciertos levitas (Nehemias 9:5-38)
Habacuc (Habacuc 3:1-19)
Yahshua (Juan 17:1-26; Marcos 14:36)
y los discípulos del Mesías (Hchos 4:24-30).

EN LA PRÓXIMA OPORTUNIDAD CERRAREMOS CON LAS POSTURAS Y ADEMANES PARA ORAR, sobre este particular ya que hay muchos que quieren a veces decir o influir en cómo debemos colocarnos para orar, pero son las Escrituras las que nos deben guiar al respecto

Atentamente Ricardo Andrés Parra rubi
Shalom a todos